Rating: un clásico programa de América hizo la peor medición de su historia y peligra su continuidad
Alejandro Fantino tuvo la dificilísima tarea de reemplazar a Fabián Doman al frente de “Intratables”, pero luego de varios meses en el ciclo, anoche el rating directamente les dio la espalda en América TV.
Aunque el conductor de América TV hace todo lo posible por levantar los números, la última medición dejó bien claro que ni siquiera el gran esfuerzo de Alejandro Fantino ayudó a detener la caída y las cifras fueron contundentes en contra de la señal de Daniel Vila.
Según las mediciones que brindó IBOPE, “Intratables” hizo flojísimo promedio de 1.5 puntos de rating mientras su competidor directo, “La hora exacta”, logró 2.2 puntos, lo que coloca a Boy Olmi y Tete Coustarot muy por encima del programa de debates de Fantino por América TV que hizo el peor número de su historia.
Polémicas que no ayudaron al rating
Durante una de las últimas emisiones del programa, todo el mundo se sorprendió porque Diego Brancatelli hizo una fuerte crítica a las políticas gubernamentales y apoyó a los empresarios. “Los que tenemos una Pyme y los que pagamos sueldos la pasamos mal. Yo tengo un supermercado en Caseros y de paso aprovecho, nos va bastante flojo: vayan y hagan un ahorro, frente a la estación de Caseros, tenemos a todos en blanco”.
El periodista reconoció: “Es un dolor de cabeza pagar los salarios más todas las cargas sociales. Es lo que realmente hace la diferencia de que no nos vaya bien. Yo no quiero que sea más fácil despedir, pero tampoco que cuando vos despidas a alguien te tengas que fundir porque te hacen juicio con cosas que son inexistentes y siempre tienen la razón y es imposible sostener. Ahora, sí tendría que ser más fácil poder contratar y que haya facilidades”.
Brancatelli explicó su postura: “Si a mí me diesen la posibilidad de contratar más gente sin tener que pagar lo que hay que pagar, yo tendría el doble de la cantidad de empleados que tengo. En mi negocio necesito el doble de gente de lo que tengo”.
Obviamente, sus compañeros no lo dejaron pasar y le hicieron divertidas chicanas al aire, incluso la más obvia: “Brancatelli se hizo macrista”. Lo más curioso es que, horas después, Roberto Navarro, otro periodista defensor del kirchnerismo, salió a criticar a Diego y no le tuvo piedad: “Los empresarios ganan dinero, lo pasan a dólares y se los llevan. No pagan impuestos, por eso somos pobres. No me rompan con eso de bajar sueldos, porque los sueldos son la mitad. Hoy el costo salarial es el 50 por ciento de lo que era en 2011, 2015 y 2016. ¿Menos quieren pagar? ¿Menos? ¡Hasta el tonto de Brancatelli aparece diciendo que no, que necesita pagar menos cargas sociales porque puso un mercadito!“.
La pelea no terminó ahí porque Diego se enteró y le contestó: “Yo soy más hombre y más compañero que él. Conmigo se equivocó y se confundió. No me faltó el respeto solamente a mí sino a cientos de miles de argentinos que tienen Pymes. Yo soy una Pyme de un negocio de menos de diez empleados. Algo familiar, un supermercado chico con muy buenos precios. Pero lo que no entendió es que hay Pymes como la mía que sufren la presión tributaria”.
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